No nos olvidemos,
jamás
que detrás de esta tristísima historia
que nos ha acompañado tantos meses
y nos ha mantenido el alma en vilo
hay un caso mas de violencia contra la mujer.
Un caso de violencia machista muy evolucionada y radical
llevada a un cruel extremo
por un peligroso maltratador.
Por eso, siempre recomiendo no minimizar el riesgo potencial,
no minusvalorar las posibilidades -por remotas y exageradas que parezcan-
de un miserable maltratador.